Proyecto de Ley de Preventa contempla incentivos fiscales a constructores
Publicada a las 06:15 AM del 28 de Septiembre de 2009 | El Mundo
El proyecto de Ley de Preventa de Viviendas en Proceso de Construcción o aún no Construidas, que tanta polémica ha generado al excluir el cobro del ajuste por inflación o IPC, contempla incentivos fiscales para las empresas que desarrollen proyectos inmobiliarios.
Las utilidades de las empresas productoras de vivienda principal quedarán exentas del pago de Impuesto sobre la Renta, señala el artículo 22 de las disposiciones transitorias.
El instrumento fue presentado oficialmente al sector privado inmobiliario y de la construcción la semana pasada por la subcomisión de Vivienda y Hábitat de la Asamblea Nacional, justo antes de ser presentado a la plenaria del Legislativo.
El mencionado artículo, de un total de 23, contempla que las compañías del sector que hayan calificado al subsidio directo habitacional quedarán exentas de aportar tasas y contribuciones al Estado, pero no precisa cuáles.
La idea que persigue el Parlamento con este artículo es incentivar la producción masiva de viviendas.
Recientemente, la diputada Laura Valls, integrante de la subcomisión de Vivienda y Hábitat, señaló que de esta forma el Legislativo entra en consonancia con el anuncio oficial de impulsar la reactivación económica en los próximos meses.
Piedras de tranca
El proyecto no ha caído del todo mal al sector privado, que hasta ahora se manejaba en este mercado sin una regulación legal.
Pero sigue generando ruido al no establecer el mecanismo de ajuste por inflación, siguiendo la línea de la resolución N° 110 del Ministerio de Obras Públicas y Vivienda.
Francisco Neri, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela (CIV), insiste en la necesidad de que se establezca una forma de ajustar los precios de los inmuebles, dada la alta inflación que registra la economía venezolana.
Es optimista y espera que de la Asamblea salga una ley que goce del consenso de todas las partes, tomando en cuenta que el mecanismo de preventa surge como una opción para quienes no tienen la forma de ahorrar.
Cálculos de la CIV indican que 74% de la población gana hasta 2.900 bolívares fuertes, lo cual le impide pagar de una vez la inicial de un inmueble.
Según Neri, como la preventa permite fraccionar la inicial, resulta el mecanismo ideal para facilitar el acceso a la vivienda y disminuir el déficit habitacional.
Otro aspecto que preocupa al sector privado inmobiliario y de la construcción es el tiempo que demora la tramitación de permisos.
Se calcula que desde que el promotor adquiere el terreno hasta que entrega la última vivienda pueden transcurrir hasta siete años.
Atendiendo esa preocupación, el instrumento en estudio tiene al pie de página una nota que hace referencia al tema de la permisología como un asunto pendiente.
El proyecto señala que la preventa no podrá iniciarse, si no se ha obtenido la permisología exigida por los organismos competentes en materia de desarrollo urbano.
Obliga a notificar al Indepabis el inicio de un proceso de venta de inmuebles en construcción, de acuerdo al artículo 3.
Y para evitar problemas del pasado prohíbe la rescisión unilateral de contratos
Las utilidades de las empresas productoras de vivienda principal quedarán exentas del pago de Impuesto sobre la Renta, señala el artículo 22 de las disposiciones transitorias.
El instrumento fue presentado oficialmente al sector privado inmobiliario y de la construcción la semana pasada por la subcomisión de Vivienda y Hábitat de la Asamblea Nacional, justo antes de ser presentado a la plenaria del Legislativo.
El mencionado artículo, de un total de 23, contempla que las compañías del sector que hayan calificado al subsidio directo habitacional quedarán exentas de aportar tasas y contribuciones al Estado, pero no precisa cuáles.
La idea que persigue el Parlamento con este artículo es incentivar la producción masiva de viviendas.
Recientemente, la diputada Laura Valls, integrante de la subcomisión de Vivienda y Hábitat, señaló que de esta forma el Legislativo entra en consonancia con el anuncio oficial de impulsar la reactivación económica en los próximos meses.
Piedras de tranca
El proyecto no ha caído del todo mal al sector privado, que hasta ahora se manejaba en este mercado sin una regulación legal.
Pero sigue generando ruido al no establecer el mecanismo de ajuste por inflación, siguiendo la línea de la resolución N° 110 del Ministerio de Obras Públicas y Vivienda.
Francisco Neri, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela (CIV), insiste en la necesidad de que se establezca una forma de ajustar los precios de los inmuebles, dada la alta inflación que registra la economía venezolana.
Es optimista y espera que de la Asamblea salga una ley que goce del consenso de todas las partes, tomando en cuenta que el mecanismo de preventa surge como una opción para quienes no tienen la forma de ahorrar.
Cálculos de la CIV indican que 74% de la población gana hasta 2.900 bolívares fuertes, lo cual le impide pagar de una vez la inicial de un inmueble.
Según Neri, como la preventa permite fraccionar la inicial, resulta el mecanismo ideal para facilitar el acceso a la vivienda y disminuir el déficit habitacional.
Otro aspecto que preocupa al sector privado inmobiliario y de la construcción es el tiempo que demora la tramitación de permisos.
Se calcula que desde que el promotor adquiere el terreno hasta que entrega la última vivienda pueden transcurrir hasta siete años.
Atendiendo esa preocupación, el instrumento en estudio tiene al pie de página una nota que hace referencia al tema de la permisología como un asunto pendiente.
El proyecto señala que la preventa no podrá iniciarse, si no se ha obtenido la permisología exigida por los organismos competentes en materia de desarrollo urbano.
Obliga a notificar al Indepabis el inicio de un proceso de venta de inmuebles en construcción, de acuerdo al artículo 3.
Y para evitar problemas del pasado prohíbe la rescisión unilateral de contratos
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